viernes, 19 de febrero de 2021

 De la vida diaria. (compartido)

                           

 Ser lo que somos.                                                                            (resumen en carpeta de Word)

A veces los destellos de algunas realidades que no nos corresponden, nos acompañan. Nos hacen creer en otras cosas que nada tienen que ver con lo que nos define en nuestra centralidad. La realidad, que siempre es una, tiende a involucrarnos en otras dimensiones tanto humanas como espirituales que nos pueden confundir. para vivir la vida que en realidad nos corresponde a cada uno, esa vida que en el fondo deseamos, es conveniente saber como reinventarnos a cada momento.Porque a fin de cuentas el asunto no es desear, es mas bien elegir con certidumbre.       

                         Relatar nos hace bien a todos.

Dicen por ahí que rememorar es algo muy digno, y que aunque nos esmeremos en demasía siempre solo recordaremos lo que en realidad nos impactó. Esos impactos parece ser que solo a uno mismo incumben, y que los traemos a veces a la vida porque nos hacen bien, mas en ultimas fechas el asunto de escribirnos, no solo nos esta haciendo bien a los que lo intentamos y lo gozamos sino a quienes nos leen. Por ende escribiré de aquí en adelante para rememorarme, pero también para compartirme en textos parafraseados de mis propios y añosos escritos.

                         Lo que sentimos nos define. 

Se puede decir que quien no dice lo que siente, no logra lo que quiere. De hecho, esta frase la encontré por ahí por el Facebook, y me la apropie. No podía ser mejor, es un hecho que de lo que sentimos estamos construidos porque esas son las cosas que nos dan forma.

                         El tiempo de los adultos se transforma a través de la paciencia. 

Quien no logra entender lo que significa ser paciente, seguirá dando vueltas en círculos, para darse cuenta al final que la vida tan solo ha sido un gran circulo, ese mas grande que se cerrara cuando los ojos queden sin mirar y el corazon sin latir. Nada esta acabado hasta que exhalamos el ultimo aliento. Así pues, nunca es tarde para comenzar a relatarnos.

El autor Duccio Demetrio nos dice que todos tenemos en lo profundo un yo tejedor. Esa significativa voz que nos habla en la mente, que nos va diciendo y que nos dirá mas cuanto mas seamos conscientes, hasta hilar las ultimas palabras

                         Es un gozo enorme recordar.

Lo es, por lo que significa en uno mismo volver a nosotros,  y por los demás que puedan gozar con nuestros recuerdos.

                         Recordar nos unifica.

Nos ayuda a dar lo que somos como personas y a saber que tampoco somos solo para nosotros, que nuestros recuerdos pueden hacer mucho bien a otros.

                          He escrito diarios personales por mas de cuarenta años. Esas enormes libretas llenas de mis vivencias, ahora se apilan para tomar un sentido: Darme la oportunidad de parafrasear con ese sentido de mi misma. Y ahí vamos, así lo haré para que se concrete en una acción compartida.

Siempre he necesitado la acción de decir. He dicho a través de textos leídos de otros seres humanos, esta vez diré con el sentido de lo que yo misma he vivido, de lo que yo he escrito y de lo mucho que de eso he aprendido.

                         Me narro en primera persona. 

Así, y solo así como he vivido mis propias seis décadas y media.

Mi criterio sera la verdad que ya se aposenta en mi. No es la misma para todos, ni debe de serlo, es tan solo un intento de compartir para disfrutar. Tampoco creo que sea una verdad definitiva ni definitoria, mas es la que habita en mi corazon. Son muchos años, solo tienen un fin: Saber que todo tiene sentido y curso cuando optamos por lo que a fin de cuentas nos ha parecido lo mejor. 

En los años mozos dudamos mas. Creemos que podemos encontrar mejores verdades y hasta estamos a la espera de que otros nos las muestren. Es así, que vamos tras creencias que se dictan, vamos tras ideas que se expresan para retornar a saber que solo dentro de nosotros mismos están las respuestas que necesitamos.

Montaigne expreso: En lo humano lo único constante, es la ambivalencia perpetua en la que se vive.

                          La ideología del grupo en el que se nace, permea. 

Si nos damos cuenta que no coincidimos en todos los aspectos que nos afectan, siempre es temprano para cambiar el rumbo. Porque esa ideología no necesariamente siempre es buena.

Nos marca. Nos planta cara y nos asusta dudar de que sea a fin de cuentas la mejor para nosotros.

                         Mucho cuidado con los mitos.

¿Existe realmente el yo?

Virginia Woolf nos dice: "La palabra yo, es solo una cómoda designación para nombrar a alguien que no existe realmente."

Esas ideas que se afirman como reales y que no lo son tanto,  aunque llevan una buena dosis de verdad, hay que saber conjugar el verbo adaptar para vivirlas mejor. Recordemos que cada uno somos únicos, y no es tergiversar la realidad para nuestra conveniencia, sino hacer de la realidad algo que sea mas afín a lo que somos.

En todas las vidas de todos los seres humanos siempre hay pasajes mas cruciales que otros. 

Siempre habremos de estar dispuestos a revisarlos, y sacar de ellos las buenas enseñanzas para seguir con paso mas firme.

Proust, el reconocido escritor francés, decía: Debemos saber solidificar lo que es la vivencia que llega en los recuerdos. 

Cuando son relevantes los recuerdos,  nos ayudan a dar circularidad al todo.

                         El motor de ser, es la esencia vital.

Mucho nos hemos confundido con el tener. Es el precio que se ha pagado por la civilización. Sin embargo esta nueva etapa del mundo esta exigiendo nuevos ajustes en la comprensión de lo que somos.

Para muchos la vida no es vida si no se expresa de una manera personal. Para otros en cambio, hay preferencia en  seguir las pautas que da la manada y así son felices. Da lo mismo, lo importante es que la acción implemente en la felicidad.

Y, así con la felicidad que se apoya en un teclado, así como en los textos escritos a mano y en letra manuscrita, que han comenzado desde la segunda parte del siglo pasado, es que continuo esta tarea que se congratula conmigo misma. Los he dejado descansar por muchos años, ahora es la hora de hacer de ellos algo digno y que no queden los originales encerrados tan solo en las cajas que poco a poco los están acogiendo. La revision ha sido emotiva, ha sido lo mas objetiva posible, luego dormirán el sueño de los justos. Reviso poco a poco y así mismo iré dando forma a este texto que nace de todas esas vivencias.

Todos somos una serie de yos que se encierran en uno, a veces encontrar el hilo conductor del yo que teje todo, se hace una tarea fascinante.

Nos damos cuenta, tanto en la acepción de contarnos, como en la que nos ayuda a fijarnos en cosas que de pronto se nos olvidan.

                         Narrar, puede ser como conversar.

Al revisar uno se encuentra con pasajes que pudieron ser de otra manera, y uno se da cuenta que al final solo pudieron ser como fueron. Nunca recriminarnos, porque todo lo que hacemos es seguro que lleva una gran dosis de buena fe.

Marguerite Yourcenar nos dice a la letra: 

                         "Trato de recorrer nuevamente mi vida en busca de su plan, seguir una vena de plomo o de oro, o el fluir de un rió subterráneo, mas este plan ficticio no es mas que una ilusión óptica del recuerdo. De tiempo en tiempo, en un encuentro, un presagio, una serie definida de sucesos me parece reconocer una fatalidad; pero demasiados caminos no llevan a ninguna parte, y demasiadas sumas no se adicionan."

Tal vez... "una conversación asidua con las emociones diáfanas de los propios recuerdos, cuya reevocación genera,  a su vez nuevas emociones."

El recuerdo es una suma de naturalezas muertas que reviven.

Proust nos dijo: "nuestro tiempo perdido es un lugar sagrado." 

Y, si que lo es. Es el espacio en donde hemos vivido y hemos creído perder mucho, cuando todo se ha acumulado en la manera en que cada uno lo ha logrado en su ser. Así como en el ser de otros que hemos tocado.

Y regresando a Proust nos dice: "creía que conocía perfectamente el fondo de mi corazón. Pero nuestra inteligencia por muy grande que sea, no puede aprehender los elementos que la componen y que permanecen insospechados hasta que, del estado volátil en que se mantienen durante la mayor parte tiempo, un fenómeno capaz de aislarlos los somete a un principio de solidificación."

Para nosotros mismos, de pronto somos otras personas. No importa que así lo sintamos, mientras volvamos al lugar circular del que hemos partido.

Todos tenemos una historia, lo importante es saber que algo de ella ha permeado a otros.

Es así, que mirando como por el ojo de la cerradura, me avoco a compartir algunos pasajes que mas que nada, han sido aprendizajes en mi misma. 

No existen verdades estáticas, no existen verdades eternas ni tampoco verdades únicas. Todo es verdad porque es absolutamente parte de la vida. 

Yo, soy una persona amante del color. Los colores pueden ser pivotes que han movido y que mueven mis días.

Continuare con mas. 

Por aquí nos seguiremos viendo. MJ








 



 

                                                                                       

                                                                                                

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