jueves, 24 de noviembre de 2022

 

De la vida diaria.

Colores, del día a día.(2)

 

Cuando el ánimo no se mantiene estable, es porque no nos hemos percatado de cuanto y como está implicada la mente. MJ

 

                                   Cuando voy revisando para comentar algunos aspectos de mi libreta número cuarenta y dos (42) lo primero que me salta a la vista es la palabra ánimo. Cuando éste no se mantiene estable de inmediato podremos visualizar algún color que nos apoye, ya iremos comprendiendo con que particular energía cuentan éstos para nuestro bien. Todos los estados de ánimo pueden asociarse a algún color, el refrán  más conocido para estas lides y que me viene a la mente de inmediato es el que utilizan los estadounidenses: feeling blue que alude a que hay cierta tristeza presente y se percibe en azul. Fue algo del sentimiento popular que hizo esta asociación, porque en realidad el color azul no es propiamente triste. En los estudios del espectro cromático se ha llegado a saber que tipo de animosidad  y energía produce cada color y en particular el color azul es más bien considerado un color primario que da certeza y protección. Por estos tiempos de principios de este siglo, en lo personal no tenía tan claro aún lo importante que es la animosidad, ese talante que tenemos al enfrentar la vida a diario. Somos los únicos hacedores de lo que nos rige por fuera y por dentro, en la naturaleza ninguna especie tiene en sus manos esta parte tan vital de poder dirigir el ánimo y a la vez en la que reside la creatividad. Va quedando claro ya, que a más donaciones recibidas más responsabilidad tenemos como homo sapiens, se nos ha entregado el poder de hacer de nuestra mente una alidada o una enemiga. Los tonos de los colores en nuestros estados de ánimo  los tenemos que ir encontrando paso a paso, generalmente los clasificamos como bonitos o feos, aunque esto es muy simplista. Un primer acercamiento benéfico es saber que los colores tienen temperatura, algunos son fríos otros cálidos.

Nos preguntamos a veces: ¿de donde proviene nuestro modo de ver las cosas?

Es un hecho cuanto influye nuestro ambiente socio económico, pero más aún las herramientas que la vida nos va presentando para la tonalidad de vida que llevaremos y más que nada lo que como seres únicos podremos proponer. Cada etapa de vida tiene sus propios tonos y ni qué decir de la adultez que es una  etapa de ir cerrando, mas  en realidad no en todo es así, hay muchas actividades nuevas y renovadoras propias de la edad madura.

 Se tiene siempre todo para la máxima felicidad (aun en lo adverso) somos nosotros mismos con la mente, que tendemos a ofuscar.MJ

En ese devenir de cada día hay situaciones impostergables y aun conociendo el color de la serenidad, todos sabemos que mantenerla en constancia no es tan fácil. Ser serenos pudiera asociarse a algún tono de azul y es por ello que lo menciono como algo primordial a comentar y relativo al ánimo.

Dice Sarah Ban Breanach: La creatividad es Santa.

Así es, mas no hay creatividad que valga si el ánimo no está bien puesto.

Y podríamos añadir que es también aliada, compañera de vida y madre de todos los buenos cambios, por ende el aspecto más activo de la vida diaria.

 Creativos seremos si nuestro ánimo está en el mood adecuado. Todo puede ser recreado por cada uno de nosotros dentro de nuestra personal percepción. Nos cuesta a veces, más se puede hacer muy entretenido y divertido si los momentos vitales los asociamos a los colores.

A pesar de nuestra complejidad tanto en el momento histórico que vivimos como en las mentes que tienden a perder lucidez, no podemos olvidar que la plenitud está  localizada en lograr la claridad de pensamiento. Muchísimo se ha escrito en los ámbitos de la divulgación de lo que somos como homos sapiens, ahí están las obras de Yuval Noah Harari que se han publicado desde hace más de una década y que muchos ya deberíamos haber leído, ese  planteamiento general de lo básico (y lo que no lo es tanto)  que viene bien saber, comprender, y profundizar el entendimiento de nuevos enfoques científicos de la historia humana. Son libros de muchas páginas que pueden fluir muy rápido si así nos lo proponemos.

 En el libro: -De animales a Dioses- podremos encontrar muchas respuestas. Con esa claridad podremos sortear lo que se nos presente. Cuando la irritabilidad se aparece más de lo debido y nos damos cuenta que estamos más vulnerables a sentirnos molestos que contentos también habrase de revisar, aprender a poner la mente en el color adecuado.

El espejismo de las propuestas de las que se nos bombardea como sociedad de consumo está relacionado con  cantidades, olvidando el flujo positivo que nos puede dar comprender las cosas con sus calidades, y evitar sentimientos de vacío. ¿De qué color es el vacío? Pueda que sea un tono neutro como un beige claro o hasta un gris, mismo que se puede complementar con nuestros colores personales. De pronto creemos que no tenemos todo lo que sentimos merecer, cuando en realidad cada ser tiene lo que necesita para trabajar su felicidad.

Parte activa de la felicidad es la lectura de textos, estos  nos proponen siempre revalorar, crear nuevos conceptos, renovarnos.

El don de reinventar la vida se vive a diario. Existen seres humanos que sin darse cuenta tienen algún chip que no está activo  y piensan (sin ser del todo conscientes)  que no se merecen algunos dones, porque a veces le dejamos en demasía a que lo externo  proponga. El primer don es el de abrir los ojos y percibir de qué color es la mañana, lo que importa es que gocemos percibir el color del ambiente y  del aire mismo. Ese volver a amanecer cada día es el primer regalo. Cuando al amanecer percibimos los colores del alba que se despliega cerca de nosotros estamos listos para continuar las tareas con el mejor talante y percibir mucho más afines a nuestros congéneres. Tener  la ventura de hacer verbal el color en que se percibe el día, gris (lluvia en ciernes) o amarillo (sol de media tarde). Y otros que iremos comentando. Quienes practicamos la acuarela logramos estar pendientes de esos cambios de coloración. Unas nubes en morado hablan de una ambientación muy diferente a las que percibimos en azul celeste.  

 Los temperamentos que nos rodean, de esos seres con quienes tan solo compartimos,  se nos van haciendo evidentes procurando reducir la animosidad de crear lidias. Cuando las controversias se presenten, se aceptan mejor.

 Si uno goza realmente con lo que uno es y sabe,  se refuerza el conocimiento, vamos por buen camino hacia los estados más claros de felicidad, se engrosa el buen ánimo.

                                                            Volver a valorar la congruencia una y otra vez,  ese  empalme de lo que creemos con lo que vivimos. Obviamente no siempre está en su máximo esplendor nuestro talante congruente, es algo que vamos coloreando. El diccionario nos dice a la letra: Congruente es una conveniencia, coherencia y relación lógica. Cuando se habla en concreto del catolicismo la congruencia se refiere a la eficacia de la gracia de Dios que obra sin destruir la libertad del ser humano, si lo analizamos con calma esto no es siempre fácil, porque ante todo habremos de definir que consideramos libertad en nuestro proceder.  

Esos dos planos en los que con constancia nos encontramos (ser y estar) se mueven siempre, más lo congruente los mantiene en movimientos mucho más claros y certeros. Lo efímero deja de asustarnos y se vuelve más una certeza de pasar a otros estados.

El tiempo tiene la majestuosidad imperativa de ser implacable, no nos engolosinemos en lo que es sustento y no es sustancia, que no es lo mismo. Sustentar es poner más énfasis en lo material, a diferencia de la sustanciar que es más de índole relativo al crecimiento que está en lo interno. Enriquecer la mente.

 Amiel, un ser que escribió puntualmente y con mucho detalle sus escritos de vida, ha sido un gran ejemplo para mí, le he ido leyendo durante muchos años, no con idea de concluir su obra con presteza y rapidez, sino disfrutando cada párrafo porque en verdad voy y regreso a sus páginas cuando así lo amerita, un ejercicio de ir encontrando los puntos de su propuesta de vida. Un amigo muy querido me la recomendó, por la comunión que podría encontrar de hacer escritos de vida.

También por estos días leía un poco de la historia muy interesante de un personaje que vivió  un tiempo en tierras yucatecas alrededor de 1810, año en el que  murió fusilado.  Me pareció muy triste que un joven que llega a tierras extrañas con una misión, resulte muerto, era una misión política que podría implicar animosidades negativas, como sucedió. Vino a sopesar qué tan viable era que se enviara a estas tierras al hermano de Napoleón. Llega Emilio Gustavo Dewitt a los 25 años de edad y como no se comprende su misión, se le da el trato de espía. Irónicamente   había desembarcado en el puerto de  Sisal en un buque que llevaba el nombre de –La Buena Intención- No sabemos bien a bien que tan buena era la suya en lo personal, y que tanto se conjuntó con las encomiendas que  traía. Fue una acción equivoca.

Por las acciones equivocas del homo sapiens, el mundo está adolorido. No es solamente lo erróneo en lo político, sino en el seno de los grupos. Nuestro ser se ve impedido a conocer mejor los colores que le habitan porque a veces la vida misma es demasiado demandante, hay que darnos espacios personales. Esos dolores que se han creado como producto de la evolución habremos de asumirlos, muchos de estos son grises, y cada uno de nosotros tendrá que transformar.

Por estos días tenía yo más tiempo de conversar con las personas que a ratos me lo permitían (heredé de mi madre la acción de conversar sin remedio y la disfruto muchísimo) es un hecho que la buena platica tiene enormes bondades. Así fue que cuando entablé conversación con el guardia del Club del que vivo muy cerca (iba yo en busca del perro de casa que se había escapado y a veces se iba por esos lares) apenas me dijo que no le había visto por ahí, entablé  la plática y de pronto salieron asuntos relativos a la pintura. Me contó que su afición en la vida era pintar y que los cursos que había tomado en Bellas Artes le habían motivado a realizarlo, por estos días andaba muy triste porque se había incendiado su casa y todo se quemó. ¿Saber aceptar lo efímero?, es un don.

¿Lidiamos con el mal? O, más bien ¿es un gran maestro? creo que ambas cosas.  MJ

 

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